Aunque
las Islas Galápagos no son un “producto” en el sentido tradicional de la palabra,
yo quería compartir un poco sobre mi experiencia en las Islas Galápagos y qué
aprendí de esa experiencia. Las Islas Galápagos son un lugar tan bonito.
Pasamos 5 días vivir en un barco, viajando entre islas diferentes. No puedo
describir todo lo que vimos y experimentamos, pero me gustaría compartir
algunos de los puntos culminantes.
Las Islas
Las
islas eran un poco de una sorpresa. Antes de ir, yo tenía la idea que todas las
islas serían la misma. Pero a mi sorpresa, cada isla era muy diferente. Vimos
unas islas muy brillantes con playas y arena alrededor de la isla, una isla que
parecía como un desierto, y una isla que solía ser un volcán. Cada isla tenía
su propia personalidad.
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| Cuatro islas diferentes |
Los
animales
Vimos
tantas animales diferentes, y qué me sorprendieron el más eran los colores. Vimos
cangrejos rojos y naranjos, iguanas amarillas, y “Boobies,” un tipo de pájaro
con picos de colores diferentes. También vimos leones marinos. Disfrutamos
mucho de la creación del Señor a través de los animales.
Nuestra
Perspectiva
La oportunidad de
ir a las Islas Galápagos era una bendición que nunca vamos a olvidar. Una noche
me senté afuera en el barco sólo mirando a las estrellas, pensando en cómo
bendecidas las NILIs éramos tener la oportunidad de estar allá. Me di cuenta
durante ese viaje de la distancia entre los turistas y la gente ecuatoriana en
esa semana, y cómo como turista, es difícil conectarse con la cultura. Conocimos
a mucha gente en el barco de todas partes del mundo: Australia, Inglaterra, Nueva
Zelandia, Estados Unidos, Noruega, y Gales. Eran personas que habían visto
mucho del mundo, algunas habían visto partes de Ecuador continental también.
Pero durante nuestras conversaciones con ellos, era muy claro que no entendían
bien la cultura ecuatoriana o la gente que trabajaba en el barco. Para mí la
experiencia en las Galápagos no hubiera sido tan rica sin nuestro interés en la
cultura y la pasión a conectarnos con los empleados del barco.
Cuando
regresamos al seminario, hablamos con muchas personas ecuatorianas que tenían
un deseo de viajar a las Galápagos algún día. Teníamos momentos humillantes,
hablando con ecuatorianos mayores que han trabajado toda de sus vidas y nunca
tendrían dinero para visitar las Islas. Me humilló que una chica de 20 años de
los Estados Unidos tenía la oportunidad de visitar un lindo lugar dentro del país
de estas personas, que quizás ellos nunca serían capaces de visitar. Recordar
ese sentimiento y como mal me sentí cuando me di cuenta de eso puede ayudarme
en el futuro cuando estoy trabajando con gente con vidas muy diferentes que la
mía. Puedo recordar que no todas las personas tienen las oportunidades que yo
tengo, y que no debo hacer alarde de esas oportunidades. Creo que este semestre
pasado cuando yo estaba capaz de ver que cada situación tiene dos lados,
aprendí y crecí tanto. A través de estas islas tan bonitas que necesito ser
humilde.
Mientras las Islas
Galápagos son importantes porque de sus vistas hermosas y animales increíbles, son
importantes a la gente ecuatoriana para dos razones más. Primero, traen un
sentimiento de orgullo tener un lugar tan bonito como una parte de su país.
También, traen dinero a la economía de Ecuador, y eso es de beneficio a todos.
Fuente:
- Mi propia experiencia
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